¿ARREBATARÁ BRASIL A CUBA EL LIDERATO DEL JUDO FEMENIL CONTINENTAL EN GUADALAJARA?

RONALDO VEITÍA, ÍDOLO CUBANO DEL JUDO EN PARÍS

París, (Prensa Latina). Las cámaras lo siguen en el Palais Omnisports de París-Bercy y su popularidad se afinca en el prestigio de una exitosa carrera de entrenador: se llama Ronaldo Veitía, cubano, figura del judo mundial.

Tiene una frase para todo, es ocurrente en sus comentarios y severo en la exigencia a sus atletas. "No me preocupo por el arbitraje, aunque molesta, sino porque mis muchachas sean cada día mejores", comentó en exclusiva con Prensa Latina.

No es posible el diálogo pausado en virtud de que estamos en el 28 Campeonato del Mundo de Judo, su vida, su pasión, que adelanta abandonará después de los Juegos Olímpicos de Londres-2012, "para dedicarme por entero a mi familia".

Héroe Nacional del Trabajo de la República de Cuba desde mayo último, cumple todo un ceremonial en las competencias. Se viste informal en la fase eliminatoria y más elegante cuando alguna de sus pupilas va a la disputa de una medalla.

Los editores de la revista francesa "Le esprit du judo" se acercan al "Veiti", como le dicen cariñosamente, para obsequiarle varias ediciones de la publicación, todas con crónicas y entrevistas consagradas al preparador de la isla caribeña.

"Aquí puedes leer lo que pienso. De cómo hemos conseguido en el judo femenino cubano 52 medallas en torneos del orbe y 22 olímpicas -a pesar de que somos un país bloqueado por Estados Unidos-, por el amor a la Patria, la entrega, el esfuerzo, el sacrificio", apuntó.

Veitía recordó, al igual que reseña la revista gala, los contratiempos que trajeron los cambios de reglas en la disciplina inventada por Jigoro Kano y lo injusto del sistema de competencias.

"Pero es igual para todos, así que nuestro secreto es el mismo: una preparación mental esmerada, fuerte. Luego viene lo físico, la técnica. Si uno no cree, es imposible llegar lejos. El espíritu, la bandera, el orgullo, son básicos", apostilló.

Se suceden los saludos y abrazos afectuosos en la zona de entrenamiento de la instalación parisina. Gente de todas partes, en especial de América Latina y Francia. "Me respetan y yo los quiero", acotó.

Preguntado en torno a las declaraciones de su colega brasileña Rosicleia Campos en el sentido de que el gigante suramericano quiere pasar a Cuba en el judo de damas, el "Profe" advirtió que la última palabra se dirá en los Panamericanos de Guadalajara, México.

Escrito por Fausto Triana